El Ayuntamiento lanza una campaña de apoyo directo a las compras en el pequeño comercio con 29.400 bonos de 20 euros que permitirán inyectar 1,47 millones al sector durante este otoño y ayudar a las familias ante el nuevo escenario de incertidumbre económica

El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha presentado hoy la campaña Bono Sevilla de impulso a las compras en el pequeño comercio de barrio, con un presupuesto municipal de 600.000 euros y que supondrá en conjunto una inyección de 1,47 millones al sector durante el otoño. Grosso modo, esta nueva iniciativa, denominada Bono Sevilla, se basa en un bono por el que se incentiva la compra directamente al consumidor. Así, de 50 euros de compra, 20 saldrán gratis.

En concreto, se distribuirán 29.400 bonos de 20 euros cada uno, que, en volumen de compras, alcanzarán los 1,47 millones de euros en aquellos establecimientos comerciales y hosteleros considerados microempresas o estén regentados por autónomos. En otras palabras, la compra mínima será de 50 euros, de los que 20 euros son aportación municipal, mientras que el consumidor abona 30 euros.

“Con esta iniciativa, damos una vuelta de tuerca a las ayudas anuales que llevamos concediendo al pequeño comercio desde 2015. Si antes eran subvenciones a las asociaciones comerciales para cuestiones como modernización e incorporación de nuevas tecnologías, en esta ocasión fomentamos directamente las compras. No serán ayudas directas al comercio y sus profesionales para afrontar inversiones, sino al consumidor para que compre en los establecimientos. De esta forma, se benefician las familias y se benefician los comerciantes”, ha explicado el alcalde en el Centro Cívico San Pablo ante distintas asociaciones de comerciantes y empresariales de la ciudad y comerciantes particulares.

Antonio Muñoz, quien ha estado acompañado por el delegado de Economía, Comercio y Turismo y también del Distrito San Pablo Santa Justa, Francisco Páez, ha explicado que esta campaña Bono Sevilla se lanza precisamente en una época, de mediados de octubre a finales de noviembre, en el que tradicionalmente existe un frenazo en las ventas del comercio: es el periodo intermedio entre el verano y la campaña de Navidad. “Por tanto, el momento más idóneo para lanzar esta campaña de impulso al comercio, y justo cuando salimos del esfuerzo económico que supone para las familias la vuelta al cole”, ha argumentado.

De hecho, el regidor hispalense ha encuadrado esta iniciativa en el paquete de medidas que está adoptando el Ayuntamiento de Sevilla para encargar el nuevo escenario de incertidumbre económica mundial, derivado de la guerra en Ucrania, la crisis energética y la subida de la inflación. “El Bono Sevilla es una experiencia piloto para ver cómo funciona este año. Pero si funciona, que lo hará porque partimos de modelos similares adoptados en ciudades como Pamplona y Zaragoza, donde lleva varios años funcionando, nuestra intención es darle continuidad en ejercicios sucesivos incrementando la partida presupuestaria”, ha abundado.

Por ello, Antonio Muñoz ha hecho un llamamiento a los establecimientos comerciales para que se adhieran a la plataforma tecnológica creada al efecto, y a los consumidores a que adquieran los bonos mediante la APP diseñada para esta campaña. Los 29.400 bonos se adjudicarán según las llegadas de peticiones.

La operativa

De entrada, el consumidor tiene que ser mayor de edad. Puede solicitar y adquirir hasta 5 bonos bonificados de 20 cada uno. La solicitud se efectúa a través de la página web Bono Sevilla (bonosevilla.es), se adjudican los bonos adquiridos con el límite de hasta 5 bonos, que se recibirán por correo electrónico. El cliente podrá imprimirlos, descargárselos en el móvil o llevarlos en la App Bono Control. El bono tiene un código QR que será escaneado por el establecimiento comercial en el momento de pagar la compra. Al finalizar la semana, el comerciante recibe el importe de la liquidación de las compra. Si opta por agotar los 5 bonos, serán 250 euros los que pague el consumidor, y 100€ los que aporta el Ayuntamiento.

Los establecimientos que se pueden adherir deberán estar catalogados como microempresas, y ejercer su actividad en la capital como comercio minorista –exceptuándose tabacos y artículos para el fumador, artículos de farmacia– y pequeña hostelería. “En suma, los comercios típicos de barrio”, ha incidido Muñoz. El listado de establecimientos adheridos se publicará en www.bonosevilla.es y el periodo para la adhesión será del 15 de septiembre a 15 de octubre.

Del 16 de octubre al 30 de noviembre –o antes si se canjean todos los 29.400 bonos–, los consumidores podrán adquirir su bono y realizar las compras en los establecimientos adheridos. Si el importe de la compra supera los 50 euros, el cliente abonará in situ la diferencia en el establecimiento.